La broma del "Gnomo Viajero" empezó hace muchos años cuando alguien se robaba un gnomo de un jardín para luego liberarlo en otro sitio a la vez que se enviaba una foto a su antiguo dueño. Esta práctica -bastante común- entre los viajeros se ha convertido en uno de mis proyectos para el 2012, siempre buscando una nueva óptica.